Un buen ejemplo lo tuvimos el pasado 18 de noviembre, día en que España tuvo que conformarse con el subcampeonato en el Mundial de fútbol sala (ante el Campeón Vigente y máximo dominador histórico del torneo, Brasil) y Copa Davis (Nico Almagro no pudo ganar frente al veterano tenista checo Radek Stepanek el punto decisivo), mientras que Fernando Alonso quedaba 3º en el Gran Premio de EE:UU dejando Sebastian Vettel su tercer Mundial casi sentenciado, algo que confirmaría una semana después en Brasil, mientras que el asturiano (que pese a un Ferrari muy inferior al Red Bull había llegado a liderar antes de 2 abandonos casi consecutivos, el primero de ellos por culpa de su ex-compañero de Renault Sebastien Grosjean) quedaba tan solo a 3 puntos.
Y todo esto se consideró (no tanto por prensa como si por aficionados) como un fracaso, sin tener en cuenta que otros muchos países ya hubiesen firmado el al menos haber estado ahí en unas competiciones tan importantes.
Lo que si se valoró en su justa medida fue otro segundo puesto: la Plata Olímpica de baloncesto (17 medallas en total, una menos que hace 4 años) en Londres. Y es que la generación de Pau Gasol, Navarro, Calderón... se quedó aún más cerca que en Pekín de hacer historia frente a una EE:UU a su vez mejor que la de entonces.
Aunque al principio parecía que iba a ser un paseo de los Kobe, Lebron y compañía (en el primer cuarto ya habían alcanzado su máxima de +10) en el segundo esta desventaja se había reducido a solo 1 tras llegar a ir por delante en algunos momentos, algo que no cambiaría en la reanudación (82-83). Un mal comienzo del último cuarto impidió la hazaña, terminando el partido con un 100-107 que redimía a la Selección tras un irregular comienzo que incluso hizo generar rumores de amaño en el último partido de la primera fase contra Brasil (único equipo que plantó cara a los norteamericanos en el Mundobasket de Turquía hace 2 años) para evitar a los de Mike Krzyzewski en semifinales.
En cuanto a nuestro mejor deportista (Rafa Nadal) valorar su temporada se hace bastante complicado.
El 2012 empezó como terminó el 2011: el serbio Novak Djokovic (que volvió a terminar como Nº1 del Mundo tras adelantarle algunos meses Roger Federer, Heptacampeón de Wimbledon) le derrotaba por séptima vez seguida en una final (Open de Australia) pero dando sensaciones mucho mejores que las anteriores, llegando a tener un 4-2 en el quinto set de la que fue la final más larga de la historia del tenis (5-7 6-4 6-2 6-7 (5) 7-5 para el serbio).
En los siguientes meses el manacorí fue dando una de cal y otra de arena.
En el primer Masters 1000 del año (Indian Wells), donde defendía final, no pudo pasar de semis frente a un Federer que parecía el de su etapa dorada (6-3 6-4) y que posteriormente derrotó en la final al jugador local John Isner (7-6 (3) 6-3), mientras que en idéntica ronda de Miami (donde esta vez Nole si pudo repetir título) una lesión le impidió salir a jugar contra Andy Murray, del que pocos sospechaban entonces que tendría su mejor año, ganando a Roger el Oro Olímpico (disputado en Wimbledon) y el primer Grand Slam de su carrera, el US Open, donde derrotó en una emocionantísima final a Djokovic (7-6 (10) 7-5 2-6 3-6 6-2).
Como era de esperar, fue en la temporada de tierra batida donde por fin pudo Rafa quitarse la espina clavada, ganando a Djokovic en 3 finales: los Masters de Montecarlo y Roma y, sobre todo, el séptimo Roland Garros que le convertía en el máximo dominador del Grand Slam francés (superando al legendario Björn Borg) en una final que tuvo que terminar en lunes por la lluvia (6-4 6-3 2-6 7-5) . El Career Grand Slam de Nole tuvo que esperar un año más.
Solo un sorprendente Fernando Verdasco en los octavos del Masters de Madrid (victoria de Roger Federer sobre Tomas Berdych en la polémica pista azul que posteriormente fue prohibida por la ATP) impidió el que hubiera sido el segundo Clay Slam tras aquel inolvidable 2010.
Recuperar el Nº1 parecía posible, y de hecho habían opciones matemáticas de ello si conseguía ganar sobre la hierba de Wimbledon, donde había jugado 5 finales en 6 años (ganando 2 de ellas en 2008 y 2010, mientras que en 2009 no pudo participar). Aunque Halle no invitaba al optimismo (derrota en cuartos frente al alemán Philipp Kohlschreiber por 6-3 6-4), no se le dio demasiada importancia al tratarse de un torneo 250.
Tras una primera ronda sin demasiada historia contra el brasileño Thomaz Bellucci (7-6 (0) 6-2 6-3) llegó la catástrofe. Lukas Rosol (doblista checo que en aquel momento estaba en el puesto 100 del ranking ATP) hizo un increíble partido imponiéndose a Nadal por 6-7 (9) 6-4 6-4 2-6 6-4. Desde entonces no ha podido volver a jugar por la lesión que ya le había apartado de Miami, lo que le ha supuesto acabar por primera vez desde 2004 fuera del Top-3 Mundial (4º) . Solo queda confíar que, como en 2010, pueda volver a resurgir callando a los que una vez más le quieren retirar.
Por supuesto, no hay que olvidar al valenciano David Ferrer, que a sus 30 años estuvo cerca de adelantar a Rafa en el ranking tras una magnífica temporada en la que se convirtió en nada menos que el primer español en ganar el último Masters del año (Paris-Bercy) además de otros 6 títulos (Auckland, Buenos Aires, Acapulco, ´s-Hertogenbosch, Bastad y Valencia), el que más del circuito en 2012. Otros resultados dignos de mención fueron las semis en RG y US Open (cayendo ante Nadal y Djokovic respectivamente) y la final del Godó, donde plantó bastante cara al propio Rafa (7-6 (1) 7-5).
La derrota de Federer frente a Juan Martín del Potro le impidió llegar al menos a semis de la Copa de Maestros (donde se impuso Nole al suizo 7-6 (5) 7-5 en un gran partido de ambos, mientras que Marc López y Marcel Granollers se llevaron el dobles), lo que hubiera dado aún más brillo al extraordinario año de un tenista que posiblemente ya habría ganado algún GS de no haber coincidido con los 3 mejores de todos los tiempos.
En Motociclismo estuvimos cerca de repetir el histórico Triplete de 2010. El catalán Maverick Viñales (3º) fue de más a menos en la nueva categoría de Moto3, mientras que el mallorquín Luis Salom (2º) explotó tarde, siendo el triunfo final para el alemán Sandro Cortese. En Moto2 solo Pol Espargaró pudo hacer algo de sombra a otro de nuestros pilotos, Marc Márquez, cuya prometedora carrera recuerda a los comienzos del mismísimo Valentino Rossi. No sería descartable verle ganando carreras el próximo año en MotoGP, donde correrá con HRC.
Y en la máxima categoría (marcada este año por la inesperada retirada del Bicampeón Casey Stoner), otro Doblete protagonizado por Jorge Lorenzo (Yamaha) y Dani Pedrosa (Honda), que fue el que acumuló más triunfos en Grandes Premios (7) pero los abandonos de Misano (San Marino) y Phillip Island (Australia) le hicieron tener que conformarse por tercera vez en su trayectoria con el subcampeonato.
Especialmente llamativo fue el GP de Japón, donde por primera vez en la historia hubo podio español: Pedrosa, Lorenzo y el talaverano Álvaro Bautista, que este año sustituyó en San Carlo Honda Gresini al desaparecido Marco Simoncelli. El 2013 se espera aún más emocionante con el debut de Márquez y el regreso de Rossi a Yamaha, que le permitirá volver a tener una moto competitiva tras 2 temporadas decepcionantes en Ducati convirtiéndose quizá en el máximo favorito al que sería su décimo Campeonato del Mundo.Toca hablar de ciclismo. Tras haber estado sancionado Alberto Contador durante varios meses por el caso del clembuterol en el Tour´10, el pinteño consiguió su segunda Vuelta a España en la que posiblemente fue la mejor edición de la historia de esta carrera, en una dura competencia con Joaquim Rodríguez y Alejandro Valverde (que también reaparecía este año tras una injusta sanción de 2 años sin haber dado nunca positivo). Purito acabó el año como Nº1 de la UCI WorldTour tras ser también 2º en el Giro de Italia (Maglia Rosa para el desconocido canadiense Ryder Hesjedal) .
En cambio el Tour de Francia (donde se paseó el británico Bradley Wiggins, quedando segundo su compañero Chistopher Froome) fue bastante decepcionante para los nuestros. Solo hubo 2 triunfos de etapa (Luis-León Sanchez y Alejandro Valverde) siendo el mejor español Haimar Zubeldia, que quedó en sexto lugar. En el Mundial de Ruta Valverde consiguió el Bronce (Oro para Philippe Gilbert) mientras que Contador solo pudo ser noveno de una CRI donde se impuso Tony Martin. En los Juegos de Londres se pasó sin pena ni gloria, echando quizá en falta al mencionado Contador o a Samuel Sánchez, al que una caída en el Tour le impidió defender el Oro de Pekín.
Y por último lo más importante: el fútbol, donde volvimos a tener final española en Europa.
No en Champions League (donde el Chelsea derrotó por penaltys a un Bayern Munich que jugaba en casa) entre Real Madrid (Campeón de Liga y Supercopa de España) y FC Barcelona (Copa del Rey) como ya daba por hecho la prensa deportiva, sino en la UEFA Europa League, donde el Atlético de Madrid, con el colombiano Radamel Falcao en estado de gracia, ganó por 3-0 a un Athletic de Bilbao que venía de eliminar al Manchester United o al Schalke 04 entre otros. El equipo colchonero sorprendería meses después aplastando en la Supercopa de Europa al Chelsea por un 1-4 que pudo ser mucho más abultado.
Quizá el 2012 no haya sido un año tan memorable como los anteriores. Pero nadie dijo que mantener esta Edad de Oro fuera sencillo. Hemos sabido dar la cara hasta el final, y en 2013 estoy seguro que llegarán muchos grandes éxitos. ¡Podemos!
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