Tampoco hablaré del corte de mangas de Cristiano Ronaldo a Javi Martínez, aunque de hecho si tiene que ver en parte con este lamentable hecho. Me explico:
Algunos periodistas, aprovechando el tirón, ya se curan en salud ante la posibilidad de que de nuevo se equivoquen con una de sus "exclusivas mundiales", y ya auguran que el tan anunciado fichaje del mediocentro navarro por el club merengue puede verse truncado por todo esto.
Puede que de verdad hubiera posibilidades de este traspaso, puede que no. Pero en el fútbol, como en todo en esta vida, se puede usar ese refrán tan español del "no digas de este agua no beberé". Veamos algunos ejemplos, el primero de 1987:
Ese mismo día 25 de junio de 1987 el crack portugués (que venía de ganar la Copa de Europa con el Oporto) se presentaba como la gran baza del entonces candidato a la presidencia del Atlético de Madrid Jesús Gil, del que negaba haber hablado con el en las páginas interiores del diario catalán.
Viajemos ahora a los 90. El siempre polémico técnico holandés Louis Van Gaal había hecho ganar al FC Barcelona 2 ligas consecutivas tras una sequía de 4 años. ¿Quien celebraba con más intensidad estos logros?
Pero esto también pasaba en el otro lado de la trinchera:
Este tampoco es un fenómeno exclusivo del fútbol:
Podría seguir horas y horas. Vivimos en una época donde cada vez resultan más difíciles los casos de jugadores eternamente fieles a un equipo como Gerrard, Totti, Del Piero...como ya he dicho antes, no se si será cierto que Javi Martínez irá al Madrid, pero tampoco hay que dar por hecho ahora que no. El tiempo dirá.
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